En el mundo actual, la igualdad de género es un tema que afecta a todas las esferas de la vida, incluyendo el mundo empresarial. En Ecuador, específicamente el papel de las mujeres en los negocios y la lucha por la igualdad de género ha estado ganando terreno en los últimos años, desde el 2018, cuando Ecuador aprobó la Ley Orgánica de Economía Popular y Solidaria, donde estableció un marco legal para el desarrollo y fortalecimiento de la economía popular y solidaria en el país, en la que se incluye el trabajo de las mujeres, al igual que en los últimos años se han puesto en marcha políticas y programas para fomentar el emprendimiento y la participación económica de las mujeres, especialmente en el sector de las microempresas. En este blog, nos enfocaremos en cómo las mujeres están liderando microempresas en Ecuador y el papel que la educación financiera juega en este proceso.
Contexto
A pesar de algunos avances en la igualdad de género en Ecuador, sigue existiendo una desigualdad significativa en el país. Según estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Censos de Ecuador, en 2020, la tasa de desempleo de las mujeres era del 10,3%, mientras que la de los hombres era del 6,7%. Además, el 29,7% de las mujeres en el país viven en hogares en los que son la cabeza de familia, en comparación con el 9,6% de los hombres. Otro ejemplo evidente es la brecha salarial entre hombres y mujeres, ya que las mujeres ecuatorianas ganan un 22% menos que los hombres en trabajos similares.
Por todo esto mencionado, son cada vez más las mujeres que buscan crear sus propios negocios y ser sus propias jefas, sin estar dependiendo de sus parejas, y de sus trabajos desigualitarios, un estudio publicado en 2019 por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) encontró que en toda América Latina y el Caribe, las mujeres emprenden en mayor medida que los hombres debido a la necesidad económica y la falta de oportunidades laborales en el mercado formal. De hecho en Ecuador es más evidente este cambio de querer emprender ya que según el Ministerio de Industrias y Productividad, el 51% de las microempresas en el país son lideradas por mujeres, y estas representan el 50% de la fuerza laboral del país, por lo que las mujeres son el motor de la economía del hogar y han logrado liderar en diversos sectores, especialmente en los microempresas. Este porcentaje es significativamente mayor que el promedio en América Latina, donde según datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial, aproximadamente el 34% de las microempresas son lideradas por mujeres. Este logro puede deberse a políticas y programas gubernamentales que fomentan la participación de las mujeres en el mercado laboral y el liderazgo empresarial, así como a un cambio cultural en la valoración de la participación de las mujeres en el ámbito empresarial.
Sin embargo, aún existen muchas barreras que afrontan estas mujeres; una de las cuales es la falta de acceso a financiamientos que, de acuerdo al Banco Mundial, sólo el 29% de las mujeres en el país tienen acceso a cuentas bancarias, dificultando aún más la posibilidad de obtener financiamiento para sus negocios. Además, las mujeres suelen tener más dificultades para obtener préstamos que los hombres y, en muchos casos, las tasas de interés son un 6% más altas para ellas.
Otro desafío importante a tomar en cuenta es la falta de educación financiera. Un estudio realizado por la Fundación para el Desarrollo Empresarial y Social (FEDES) en 2018, encontró que la falta de educación financiera era uno de los principales desafíos que enfrentan las mujeres emprendedoras en Ecuador, este estudio también señaló que el 65% de las mujeres encuestadas no tenía conocimientos básicos sobre finanzas, por lo que esta barrera es de gran importancia ya que juega un papel clave en la lucha contra la desigualdad de género en el mundo de los negocios.
La educación financiera permite a las mujeres líderes de microempresas adquirir las habilidades y conocimientos necesarios para administrar sus finanzas y hacer crecer sus negocios, sin depender de alguien. Un ejemplo de esto es el estudio que realizó el Banco Mundial (2018), sobre acelerar el empoderamiento económico de las mujeres, concluyeron que las mujeres emprendedoras con educación financiera tienen mayores tasas de ahorro, mejores habilidades para administrar sus finanzas y, en promedio, generan un 20% más de ingresos que las mujeres que no tienen acceso a educación financiera. Además, puede ayudar a las mujeres a tomar decisiones más informadas en cuanto a obtención de préstamos y el manejo de sus deudas, reduciendo su vulnerabilidad financiera y aumentando su resiliencia en tiempos de crisis económicas.
Otra dificultad que estas mujeres con microempresas enfrentan a lo largo de su emprendimiento, es la falta de redes de apoyo y mentores en el mundo empresarial en Ecuador, ya que a menudo, se les hace difícil encontrar personas que les puedan brindar orientación y consejos valiosos para enfrentar los desafíos que enfrentan el día a día en sus negocios, esto es un tema crucial ya que esta orientación y acompañamiento puede ayudar a disminuir errores o hasta evitar la quiebra de sus negocios.
En conclusión, la educación financiera y acompañamiento financiero para mujeres emprendedoras puede generar una serie de beneficios a nivel individual y colectivo, sin duda cada vez más las mujeres son agentes clave en el sector de las microempresas y su empoderamiento financiero es esencial para superar todas estas barreras que enfrentan en el mundo empresarial actual. Es por eso que creemos que al empoderar a las mujeres con herramientas, recursos, acompañamiento y conocimientos financieros, harán tener negocios más exitosos y prósperos, y a la par estamos contribuyendo a la construcción de una sociedad más igualitaria y próspera para todos, solo a través del compromiso y la acción colectiva se puede lograr un Ecuador verdaderamente igualitario y justo para todos.